El Chlamidofilia psittaci y el Psittacine adenovirus HKU1 pueden haber contribuido a crear enfermedades en humanos.
Pekín.- Investigadores de la Universidad de Hong Kong han identificado un virus hasta ahora desconocido en loros que puede haber contribuido a crear una enfermedad en humanos, descubrimiento surgido a raíz de que seis trabajadores de un centro de cuarentena animal fueran ingresados con infección pulmonar.
Según publica el diario hongkonés South China Morning Post, la investigación también arroja cierta luz sobre por qué algunas enfermedades simples en animales se convierten en más graves a la hora de atacar a los humanos, apunta el microbiólogo Yuen Kwok-yung, director del proyecto de la Universidad de Hong Kong, dijo Efe.
Los descubrimientos, publicados por la revista científica PLoS, especializada en enfermedades tropicales, se deben a una investigación que el equipo de Yuen comenzó en noviembre de 2012, cuando seis trabajadores de Hong Kong que habían tratado a loros en cuarentena traídos de Sudamérica fueron ingresados con infección respiratoria.
Entonces se consideró que los loros tenían Chlamidofilia psittaci, un virus común en 60 % de los animales tropicales pero que sólo se contagia de forma ocasional a humanos y en pequeña escala. "Sentimos que era inusual que ese virus hubiera infectado a tanta gente", dijo Yuen, que añadió que "esa es la razón por la que empezamos a mirar a otros motivos de que esta enfermedad se comportara de forma tan anormal".
Los investigadores estudiaron 8 de los 16 loros de Sudamérica del centro, y hallaron en cambio otro virus hasta entonces sin identificar, que llamaron Psittacine adenovirus HKU1.
El estudio subraya que las aves con una carga elevada de este virus también estaban contagiadas de Chlamidofilia, de forma que ambas debilitaron el sistema inmunológico de los pájaros y elevaron los niveles de esa bacteria, siendo más fácil causar un brote en humanos.
Yuen es uno de los principales investigadores de virus del mundo, nombrado en 2003 "héroe de Asia" por la revista Time por su trabajo durante el brote de SARS ese año en la excolonia británica, que logró averiguar cómo el virus que había causado la enfermedad había pasado de murciélagos a humanos a través de civetas.
En este caso, asegura que su descubrimiento puede contribuir a saber más acerca de por qué algunas enfermedades comunes se pueden convertir en amenazas para la vida humana, aunque los seis trabajadores afectados se recuperaron.