Protegen a cotorras cubanas en Paisaje Natural Hanabanilla
Santa Clara, 26 jul .- Prohibición de cruce de personas, vigilancia y conteo sistemático de los nuevos ejemplares que conforman los bandos de cotorras cubanas, caracterizan estas jornadas estivales en el Paisaje Natural Protegido Hanabanilla.
En julio, los adultos enseñan a volar a los pichones, los cuales salen por vez primera de los nidos, etapa óptima para el hurto de las crías por aquellas personas dedicadas al comercio ilícito de ese animal, significó José Antonio Santos, especialista en fauna silvestre, de Villa Clara.
Bandos conformados por más de 80 cotorras cubanas demuestran la recuperación de la especie en el área, luego de la ejecución del programa de preservación por más de una década, añadió.
Rafael García, técnico de fauna en esa zona protegida, explicó a la AIN que, cuando comenzaron las labores conservacionistas, los grupos apenas sobrepasaban las 15 parejas.
La cultura ambientalista creada en los habitantes de los asentamientos locales durante más de 10 años de trabajo, ha permitido también la recuperación de otras especies amenazadas, como el carpintero, el sijú y el tocororo, acotó.
Estas aves endémicas de Cuba están severamente afectadas por la negativa acción del hombre, de ahí que son protegidas legalmente y prohibida su caza, comercio y cría, aseveró.
Desiderio Díaz y su familia están integrados hace más de una década al cuidado de las cotorras del área protegida Hanabanilla, y mantienen la vigilancia para evitar que personas ajenas invadan el lugar.
Mi vivienda está ubicada en uno de los senderos que conduce a la zona donde ponen las aves, y los polluelos realizan sus primeros vuelos, por eso en este período coloco avisos prohibitivos.
Explicó que realiza diariamente recorridos de campo, junto a sus hijos, para detectar la posible presencia de infractores de la ley.(AIN)