Presencia de aves migratorias en casas
Sorprendidos porque algunas aves migratorias que provienen de otros estados como la Cotorra Serrana, se alimentan de piñones de árboles ubicados dentro de la ciudad, principalmente de la zona centro Saltillo, están en peligro de desaparecer.
El Museo de las Aves de México siempre ha dicho que hay que cuidarlas y no exponerlas a los cazadores. Son aves que durante su alimentación son fáciles de detectar. Tienen un sonido especial que históricamente se les emparentaba con un tipo de alharaca o graznido de voz humana, pero que no es cierto.
Además, se divierten cuando comen piñones y si se ven en conjuntos de diez o quince aves, crean una atmósfera especial de sonido semejante a la lluvia de granizo. Nunca andan solas, siempre en parejas y para seleccionar los lugares donde comen viajan mucho y siempre regresan al árbol de piñón en que se les vio por primera vez.
Quizás de noche, el graznido de estas aves migratorias suele impactar, sobre todo en el campo, en las casas rodeadas de árboles piñoneros, de ahí que provengan muchas leyendas y mitos que tienen que ver con el grito de brujas, si es que gritan, o algunos efectos imaginados por el ser humano.
La parte oriente de la ciudad de Saltillo atrae mucho a las cotorras serranas por la existencia de árboles piñoneros, de ahí que esta hermosa ave de gran pico, fuerte y garras enormes, se arriesgue a salir de su hábitat y se meta a la ciudad. Esto le ha costado caro porque muchas personas las llegan a atrapar y usarlas como mascota, o en otro caso, matarlas de manera criminal.